A medida que vamos creciendo física, emocional y mentalmente se considera que vamos entrando y cerrando etapas de un desarrollo crucial, donde finalmente alcanzamos nuestra "fase adulta". Es curioso, porque esta fase, legal y socialmente hablando, es conocida genéricamente como el ya "ser mayor de edad" y así entrar dentro de la clasificación social y anatómica del ser humano. ¿Cuándo es el momento donde realmente tenemos suficiente madurez para ser responsables de nuestros actos? ¿Se puede medir esa madurez al cumplir 14, 16, 18 años? Esta clasificación, por supuesto, es otro tema muy amplio al que aludir y hablar. Del cual iré hablando en mis diferentes posts del blog.
Continuemos...Todo esto esta muy bien... sin embargo, a día de hoy, dentro de cada fase, en muchos centros escolares e incluso a nivel cultural, aprendemos sobre cuestiones inclusivas en nuestra sociedad como pueden ser nuestras emociones, comportamientos y perspectivas. Sin embargo... ¿en algún momento hablamos sobre nuestra identidad? Quienes somos, como nos sentimos... que necesitamos...
Quizás en alguna ocasión si que se trata de alguna manera el tema de la identidad... pero la cuestión no es tratar este tema, como muchos otros, en módulos o temarios, sino que sea parte de nuestro crecimiento e interacción. Que llegue a englobar nuestras muchas fases de desarrollo físicas, emocionales y mentales... personales y profesionales... lo primordial es buscar NUESTRO camino personal. No el emular al que tengo al lado para que los demás me acepten o quieran. Y a su vez, el entender y abrazar el hecho de que el sendero por el que caminamos cambia. Y ese cambio no es ni bueno ni malo. Simplemente es. Tal cual. Si, por supuesto suena todo muy fluido y quizás hasta fácil. Pero a lo que quiero llegar es que no se trata de que se fácil o difícil si no que más bien es una pieza fundamental del puzle para poder coexistir en paz y harmonía.
No significa despojarnos de las experiencias y emociones que nos traigan un estado emocional más apagado o angustiado. Realmente significa el saber abrazar y aceptar esos momentos para así poder florecer y seguir ampliando nuestro sendero. El saber estar y saborear cada parte de esa aventura es lo que nos fortalece y nos apoya a la hora de alcanzar nuestras metas, nuestras relaciones y objetivos. Sin embargo, si estamos enfocados en mantener un estado de animo de "felicidad". Seguramente nos veamos descarrilamos de poder integrar y asentar aquello que nos rodea, factores externos e internos. El vernos en el ojo del huracán pero conseguir encontrar la calma que ahí se allá.
Una persona no es más capaz que otra. Simplemente es un trabajo personal que nos guía hacía el aprender y utilizar las herramientas adquiridas para lograr alcanzar esos momentos de paz. Cuando sintamos sentimientos o pensamientos que nos aturullan el saber que tenemos la opción de volver a nuestro epicentro es fundamental en nuestro camino. Te animo a establece el camino neuronal que te ayude a sentir que tú también puedes lograr esa autonomía y estar conectado con tu red interpersonal.
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